Consume te de menta para bajar la presión te digo como Hacerlo

Se ha demostrado que el té de menta tiene un efecto reductor de la presión arterial y se dice que es tan eficaz como un inhibidor de la ECA.

Los ingredientes activos del té de menta son el mentol y el salicilato de metilo, que se ha demostrado que son eficaces individualmente para reducir la presión arterial.

Los beneficios para el corazón del té de menta provienen de la capacidad de esta planta para dilatar los vasos sanguíneos del corazón.

La capacidad de la menta para aumentar la circulación puede hacer que su corazón bombee con mayor eficacia, lo que puede ayudar a prevenir o retrasar el desarrollo de la hipertensión.

También se cree que el té de menta mejora la digestión y ayuda con las náuseas asociadas con las náuseas matutinas o los tratamientos contra el cáncer.

Beber te de Menta es Bueno para los Hipertensos

Se ha descubierto que consumir té de menta puede tener un impacto significativo en los niveles de presión arterial de las personas que la padecen.

De hecho, un estudio demostró que este té de hierbas contiene compuestos llamados teofilina y apigenina que pueden ayudar a reducir la presión arterial alta de forma natural.

Esto se debe a su efecto diurético que ayuda a reducir la cantidad de líquido en el cuerpo, lo que también reduce la presión arterial.

Entre otros beneficios, también se cree que este té de menta es capaz de reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.

El efecto del té de menta no está claro para quienes no sufren de hipertensión arterial, pero se ha demostrado que es beneficioso para quienes están en tratamiento o tienen condiciones de salud preexistentes.

Estudios del Te de menta y la Presión Alta

Hubo un estudio publicado en 2015 que mostró que beber té de menta puede reducir la presión arterial alta de forma natural.

El estudio encontró que este té de menta podría disminuir la presión arterial hasta en 10 puntos sin efectos secundarios.

Si desea bajar su presión arterial sin medicamentos o cirugía, entonces debe intentar beber té de menta todos los días durante un par de semanas antes de decidir si se adherirá o no.

La presión arterial alta, también llamada hipertensión, se define como una lectura de la presión arterial superior a 140/90, informa el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre.

Cuando la presión arterial es alta, el corazón tiene que esforzarse más para hacer circular la sangre por el cuerpo y suministrar oxígeno y nutrientes a los órganos vitales.

La hipertensión puede aumentar el riesgo de padecer enfermedades graves, como derrames cerebrales, enfermedades cardíacas, insuficiencia cardíaca e insuficiencia renal.

El té de menta y la hipertensión

Según el Centro Médico de la Universidad de Maryland, el consumo regular de té de menta puede ayudar a reducir la presión arterial, aunque las pruebas son todavía muy preliminares.

Prepare una taza de té de menta remojando 1 cucharadita de hojas secas de menta en una taza de agua hirviendo durante aproximadamente 10 minutos.

Efectos secundarios y seguridad

Hable con su médico antes de beber grandes cantidades de té de menta.

En general, el té es seguro para las personas sanas, incluso en grandes cantidades, aunque puede causar acidez o reacciones alérgicas.

Evite el té de menta si está embarazada o amamantando, si padece una enfermedad de reflujo o diabetes o si toma medicamentos para la presión arterial.

Evite otras formas de menta, como el aceite de menta, que es aún más probable que cause efectos secundarios e interacciones con los medicamentos.

Otros tratamientos para la hipertensión

Hable con su médico sobre la posibilidad de hacer cambios en la dieta y el estilo de vida para prevenir y ayudar a tratar la hipertensión.

Su médico también puede recetarle medicamentos para reducir el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular.

Además, mantenga un peso saludable, deje de fumar y encuentre una forma de controlar el estrés, aconseja el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre.